Nuevamente vecinos de la Plaza Aníbal Pinto y de la subida Cumming en Valparaíso denuncian desórdenes y ruidos molestos a altas horas de la madrugada. Son cientos de jóvenes que llegan a este lugar para seguir con el "carrete", incluso después del toque de queda y sin que nadie los fiscalice. "Si usted ve, el toque de queda es un chiste. Nadie vigila nada porque ya están superados", asegura un vecino. Otro residente señala que "llega Carabineneros, hacen acto de presencia pero después se van luego". El delegado presidencial de la Región de Valparaíso, Jorge Martínez, dijo que "hasta el momento yo no tengo una denuncia formal, pero el seremi de Salud está investigando la situación. Las actividades y fiestas que no tengan permiso, no se pueden realizar. Y ante las denuncias de los vecinos, se van a tomar las medidas que correspondan para quien realice actividades no permitidas".