Una vida de excentricidades, codeándose de grandes estrellas y magnates, logró recaudar 120 millones de dólares y hasta la fecha gozar de impunidad en Malta, Europa. Sus víctimas esperan justicia y que se consiga su extradición ya fallida anteriormente, considerando que muchos quedaron en la calle por este engaño.
Era 2016 y todas las miradas estaban puestas en Alberto Chang, cuando innumerables víctimas acusaban por estafa piramidal al líder del grupo Arcano. A la primera señal huyó a Malta en Europa, donde se mantiene hasta hoy en la impunidad y bajo libertad a cinco años del suceso. Rafael Gómez, abogado de los afectados, asegura que "el perfil de las víctimas es de clase media. Es decir, todo este engranaje y la organización criminal se formó apostada en un perfil de víctimas que no tuviesen una repercusión dentro del mercado. Pero claramente hay algunos del mundo de la televisión y el ambiente artístico", como Josefina Montané, José Miguel Viñuela y el deportista Tomás González. Más de 100 personas que cayeron en la trampa, al ofrecerles rentabilidades estratosféricas y seguridad financiera, de la mano de un inigualable currículum de Chang que impresionó a todos. Una vida de excentricidades, codeándose de grandes estrellas y magnates, logró hacerse de contactos y recaudar 120 millones de dólares. Pese a los intentos de extradición, fue su madre en Chile, Verónica Rajii, quien fue condenada por delitos de estafa a cuatro años de libertad vigilada intensiva. Ahora lo que resta es seguir intentando su extradición o esperar que salga de Malta, lo cual es prácticamente es imposible. Según explica Carlos Gajardo, ex fiscal del caso, "los simples delitos prescriben en el plazo de cinco años, y si la persona se ausenta del país, ese plazo se computa por el doble, por lo tanto la prescripción no va a operar antes de 10 años".