Un estudio revela altos niveles de bacterias en plazas emblemáticas de la capital. En fecha de altas temperaturas conoce los peligros de las aguas estancadas.
Ante las altas temperaturas que azotan la Región Metropolitana durante el verano, es común ver a transeúntes sumergiéndose en las piletas de las plazas públicas para refrescarse.
Sin embargo, un análisis reciente reveló que estas aguas contienen altos niveles de contaminación bacteriana, superando incluso las de un inodoro. Especialistas advierten sobre los riesgos de infecciones cutáneas y gastrointestinales.
Un equipo de CHV Noticias tomó muestras de agua en tres emblemáticas plazas de Santiago: Plaza de Armas, Parque Bustamante y Plaza Patricio Aylwin.
Las muestras fueron enviadas al Centro de Investigación en Biomedicina de la Universidad Finis Terrae, donde se analizaron los niveles de contaminación microbiológica.
Los resultados fueron alarmantes: Se encontraron 500 unidades formadoras de colonias por mililitro de agua, un indicador de la presencia de bacterias peligrosas.
Además, se detectaron microorganismos asociados a contaminación fecal, lo que sugiere que estas aguas están expuestas a desechos humanos y animales.
Para dimensionar el nivel de contaminación, los investigadores compararon las muestras de las piletas con el agua de un inodoro. Sorprendentemente, el agua del baño resultó estar más limpia que la de las fuentes públicas.
La alta carga bacteriana en las piletas de Santiago representa un grave riesgo sanitario. Expertos advierten que la exposición a esta agua puede provocar infecciones cutáneas, enfermedades gastrointestinales y hasta infecciones en heridas abiertas.
Además, la presencia de larvas y otros microorganismos agrava el peligro para quienes se sumergen en estas aguas sin saber su real estado.
Ante esta preocupante situación, especialistas hacen un llamado a la ciudadanía a evitar el contacto con el agua de las piletas y buscar alternativas seguras para combatir el calor.
La Plaza Patricio Aylwin de una de la opciones más seguras al momento de refrescar. Ésta cuenta con chorros de aguas aptos para que los traseúntes puedan mojarse y jugar en ellas.
Mientras el calor sigue golpeando la capital, los comunidad deben tomar conciencia del peligro oculto en las piletas de sus plazas. Lo que parece un alivio momentáneo, podría convertirse en un grave problema de salud.