“Y, ¿cuándo llueve?” es la pregunta con la que más debemos lidiar a diario en esta época del año y, lamentablemente, la respuesta es tan cotidiana como la interrogante: “por ahora, no se ve nada de agua”. La situación más alarmante, en cuanto a cantidad de agua caída, la encontramos entre las regiones de Coquimbo y del Maule en dónde el déficit promedia el 90% este año.
La zona central del país suma su décimo año de sequía consecutivo transformándose en la más prolongada en la historia conocida de Chile. Entonces, ¿qué pasa? ¿por qué ya no llueve cómo antes? ¿qué impide que lleguen las tan necesarias precipitaciones?
Según Eduardo Sáez Brito, meteorólogo de #ElTiempoCHV hay un gran culpable de la falta de lluvias en el centro del territorio: el anticiclón subtropical semipermanente de del Pacífico Sur, o simplemente, la alta presión de la cual tanto se habla en los informes del tiempo.
Hay dos puntos que llaman la atención respecto a este anticiclón o alta presión:
1.- Se encuentra muy fortalecido.
2.- Se ubica más al sur del lugar en el que debiese estar en esta época del año.
¿De qué se trata? La Dirección Meteorológica de Chile lo define como “una gran área de la atmósfera en la que el aire desciende y rota en el sentido contrario a las agujas del reloj. Su posición casi inamovible (por eso, semipermanente) hace que el anticiclón juegue un rol fundamental en el clima de nuestro país y sea buena parte de la razón del clima tranquilo (generalmente) que poseemos”.
“Los anticiclones son ante todo regiones en donde justamente están inhibidos los movimientos verticales que permiten la formación de nubes y por tanto precipitaciones, de ahí que el anticiclón sea una especie de bloqueo o destructor de sistemas asociados a lluvias. Hay dos factores importantes a la hora de determinar la influencia que tiene el anticiclón en los eventos de lluvia: su posición y su intensidad”, afirma la DMC.
Sabiendo lo anterior, Eduardo Sáez complementa que “habitualmente la alta presión, que bloquea el paso de los sistemas frontales que traen lluvias desde el sur al centro del país, en otoño debiera replegarse desde Coquimbo hacia el norte (en el verano su extensión abarca hasta Bío Bío, La Araucanía, Los Ríos, e incluso, en ocasiones hasta Los Lagos). Pero, por diversas razones, es más frecuente que esta masa de aire se mantenga por un periodo más prolongado hasta las regiones de O’Higgins, Metropolitana y de Valparaíso en esta época del año. Todo eso con una intensidad o fortalecimiento que sólo en contadas ocasiones pierde fuerza”.
La Celda de Hadley ¿de qué se trata?
El aire está en constante movimiento en la tropósfera. Hay zonas en donde el aire asciende (sube desde la superficie de la Tierra hacia el techo de la Tropósfera a unos 12 kilómetros de altitud) y otras en que desciende (baja desde lo alto de la Tropósfera hacia la superficie terrestre). Este movimiento rotatorio recibe nombres de acuerdo a su ubicación, en nuestro caso, nos afecta la Celda de Hadley.
Esta recibe aire cálido u húmedo que sube desde la zona tropical hacia lo más alto y, en nuestro país, el aire frío de la parte superior de la Tropósfera baja convirtiéndose en una especie de “cortina” que impide la formación de nubes. Ese fuerte descenso de aire “antes se ubicaba en el norte del país en esta época, pero ahora, desde hace tiempo, se posiciona sobre la zona central del país. Este flujo refuerza el borde sur del anticiclón”, afirma el meteorólogo de #ElTiempoCHV
En consecuencia, mientras el anticiclón siga fortalecido y ubicado sobre la zona central será difícil que los sistemas frontales (o bajas presiones) que traen las lluvias desde el sur puedan alcanzar estas regiones de Chile. Y este invierno, ¿será lluvioso? Eso es imposible saberlo, más aún en estas circunstancias, en que cada vez los cambios en la atmósfera son más repentinos y bruscos. Los patrones del clima están cambiando y, la única certeza, es que debemos adaptarnos a eso.
10/05/2019
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