La víctima, de 34 años, fue encerrada en una casa por un ciudadano venezolano y, según el Ministerio Público, solo salía cuando lo obligaban a hacer "mandados", consistentes en repartir drogas en el campamento.
Un hombre de 34 años fue secuestrado y se mantuvo "esclavizado" durante dos semanas al interior de una casa ubicada en la toma de terrenos del cerro La Virgen, en la comuna de San Antonio, región de Valparaíso.
Así lo dio al conocer el Ministerio Público en el juicio oral contra Pastor A.R.E., de 32 años, quien es acusado de los delitos de secuestro y tráfico de drogas, pues al ser aprehendido fue sorprendido con narcóticos en su poder.
Según relató la víctima, fue en enero de este año cuando fue raptado y, posteriormente, llevado hasta una vivienda donde permaneció cautivo. De ahí, solo salía cuando lo obligaban a hacer "mandados", consistentes en repartir drogas en el campamento.
"Junto a tres sujetos más, intimidándolo con matar a su familia, lo suben a un vehículo, trasladándolo a un inmueble ubicado (...) en el cerro La Virgen, donde sin derecho, lo encerraron, privándolo de su libertad por aproximadamente tres semanas", se detalló en la audiencia.
En uno de esos encargos, informó El Líder de San Antonio, el treintañero consiguió un teléfono y llamó a Carabineros. Por fortuna, logró enviar su ubicación a funcionarios del OS-7 y fue rescatado el 30 de ese mes en un allanamiento.
"Ayuda. Necesito que vengan urgente", "estoy esclavizado en un punto de drogas" y "es urgente, me van a matar", fueron los mensajes que el afectado mandó por la aplicación WhatsApp.
En el operativo, funcionarios de la institución policial arrestaron al ciudadano venezolano, quien ingresó de manera irregular al país, tras ser apuntado por la victima como uno de sus captores.
"Pastor lo agredió psicológicamente y físicamente, amenazándolo de muerte, apuntándolo constantemente con armas de fuego en la cabeza, encerrándolo en una pieza con cadena y candado, siendo finalmente rescatado por Carabineros", acusó el Ministerio Público.
En vista de lo anterior, Fiscalía solicitó al Tribunal Oral en lo Penal de San Antonio que se le condene a 18 años de presidio por el delito de secuestro y a otros 5 años por tráfico de drogas en pequeñas cantidades. La defensa alega que el imputado no participó en los hechos.