La postal resume bien la situación que se vive en Viña del Mar. A un lado se encuentra el clásico Hospital Gustavo Fricke, el antiguo pero que está operativo, y a solo unos metros está el nuevo y moderno, pero estéril, ya que aun no entra en funcionamiento.
Han pasado 6 años desde que su construcción fue aprobada. Su entrega oficial estaba planificada para el 8 de diciembre de 2016, de esa fecha han pasado 2 años y 4 meses, según detalla un informe de Contraloría.
Desde el exterior aún se ve como cuelgan cabes, mallas que contienen partes de la infraestructura sin terminar y trabajadores que corren de un lado para otro en faenas de construcción.
Esa es la realidad del remozado recinto médico que debía reemplazar al antiguo edifico que tampoco vive sus mejores días.
Por ejemplo, a la entrada, es posible ver cajas que contienen medicamentos apilados en el suelo. Ya al interior el panorama tampoco mejora, ya que cualquier pasillo hace de lugar de acopio, claramente sin los requerimientos ni resguardos para mantener insumos médicos, menos para guardarlos.
Y a falta de que se entregue el nuevo Gustavo Fricke el antiguo sigue operativo, lo que ha permitido que paciente que se encuentran esperando ser atendidos han sacado fotos de perros callejeros en su interior buscando un nuevo hogar y ascensores que no funcionan en los que se apilan bolsas y bolsas de basura.
En tanto que las salas de atención se suelen encontrar repletas con personas enfermas en camillas que son acomodadas en los pasillos que se encuentran un poco más despejados, ya que acusan falta de camas.
Todo, mientras los funcionarios se las ingenian para hacer malabares con la antigua infraestructura del hospital.
"El proyecto fue haciendo avance de obras porque nos seguimos encontrando con temas que se habían planificado y se fueron alargando", explica Eduardo González, del Desarrollo Institucional Servicio de Salud de Viña del Mar.
En la misma línea sostiene que "todos lo temas de multas o los problemas que han existido estamos completamente con Contraloría día a día con ellos y las multas que nos han pedido hacer las hemos ejecutado".
Eso sí, aclara que "estamos en un 95,72% de avance, estamos en la última etapa, el proyecto está casi listo. Estamos esperando que entre el equipamiento".
Justamente sobre esto, informa que se trata de equipos "potentes de última generación que hoy no existen (en Chile) y que nos va a costar un periodo de tiempo para que funcionarios pasen a ocuparlos".
Actualmente, el mismo documento de Contraloría detalla en $9.807 millones los gastos adicionales por trabajos del nuevo hospital, $1.266 millones por encima del máximo autorizado.
Cifra que puede seguir aumentando a medida que el nuevo Hospital Gustavo Fricke siga sin ser entregado y puesto al servicio de la comunidad.
25/04/2019
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