El refrán no calza con nuestro país, simplemente, porque se utiliza en España para las precipitaciones de primavera que son algo así como las lluvias “mata pajaritos” para nosotros.
Cada vez que llega el cuarto mes del año, en Chile nos preparamos para las lluvias de otoño. Y, salvo excepciones, por lo general no son muchas las precipitaciones que caen en este mes. Entonces, ¿de dónde salió eso de “abril, lluvias mil”?
Ese dicho proviene de España, tal como lo lees. De hecho, se utiliza principalmente en la zona de Castilla para referirse a las precipitaciones de primavera en el hemisferio norte. Si tuviésemos que hacer un símil con Chile, serían como nuestras lluvias “mata pajaritos” (que ternura de calificativo) de octubre-noviembre.
Te puede interesar: ¡Siga participando! Santiago registra un -88% de agua caída este año y, por ahora, no hay lluvias a la vistaSegún el instituto Cervantes, “el origen de este refrán se remonta a la tradición, por lo que es complicado otorgarle una fecha estimada de uso popular". Algunos artistas como Antonio Machado lo incorporaron. Escribía el poeta sevillano en su obra Campos de Castilla:
Son de abril las aguas mil.
Sopa el viento achubascado,
entre nublado y nublado
hay trozos de cielo añil.
Agua y sol. El iris brilla.”
Las estadísticas confirman que eso de “abril, lluvias mil” no tienen nada que ver con Chile. Es más, este mes, Santiago apenas registra 1,4 milímetros de agua caída con un déficit del 91% en lo que va del año. Entre las regiones de Coquimbo y Los Lagos, la falta de precipitaciones en 2019 promedia un -68%. Cifras que más allá de aclarar el origen de un refrán, reflejan que la sequía más prolongada en la historia conocida de nuestro país sigue expandiéndose y entró ya en su décimo año consecutivo.